Durante el período gubernamental del Ing. José Isabel Rodríguez Elías, se permitió que el Instituto de ciencias Autónomo de Zacatecas, mediante decreto del 6 de septiembre de 1968, el ejecutivo del Estado lo transformara en la Universidad Autónoma de Zacatecas.
Esta transformación obedecía así a un acto demagógico del gobernador, ya que de hecho el antiguo ICAZ funcionaba prácticamente con el mismo subsidio estatal, sólo que ahora con otro nombre: UAZ. El desarrollo de ésta determinado por dos influencias combinadas: la francesa y la alemana. La primera mediante la organización federada de escuelas e incorporación de nuevas carreras de profesión científica (agronomía), y la segunda con la incorporación a la universidad de institutos de investigación (el centro de investigaciones históricas fundado en 1968).
El resultado de las sumas de estas influencias condicionan por un lado, la reunión federada de escuelas, con completa autonomía académica entre ellas y, por otra, integrado una cadena paralela y sin ninguna relación orgánica fundamental con las escuelas, los institutos y centros de investigación.
La UAZ. En esta época (1968), se podía caracterizar según José Revueltas, en juventud y revolución, en los siguientes términos “...si la conciencia universitaria<...> del estudiante se conforma acríticamente con la sociedad en que vive <...> deja de ser una conciencia activa, deja de tener el atributo que define a la conciencia misma como movimiento y transformación revolucionaria, para convertirse en el espejo inmóvil de la sociedad...”
En los primeros años como universidad. La institución, al lado de un proceso vertiginoso de desarrollo, muestra en su interior una dinámica de discusión y análisis de sus estructuras, organización, funcionamiento, contenidos, metodología y técnicas de la enseñanza, vinculación con los sectores desprotegidos de la sociedad, entre otros; en la que se incluye de manera significativa el “simposium de Reforma Universitaria” que se dio entre los años 1971 – 1972 y que trajo como consecuencia, entre otras, la Reforma de la Ley Orgánica de la Institución mediante decreto de fecha 3 de mayo de 1972 y la del Estatuto General. De 1968 – 1972 la población estudiantil se incrementó en un 200%, el personal docente y administrativo más del 100%, sus ingresos económicos en un 260 %; el aumento cualitativo y cuantitativo de las escuelas y departamentos y el fortalecimiento del patrimonio universitario, son algunos aspectos que reflejan esta situación.
Hasta antes del Simposium de 1971, los planes y programas de enseñanza de la escuela preparatoria, se dieron a través de la democracia por procedimiento (C. Castoriadis) ya que estos fueron impuestos por las autoridades educativas de la institución, atendiendo sólo los intereses económico y políticos que prevalecían en la época y desatendiendo a lo social, se dio la desigualdad de oportunidades en la enseñanza (R. Boudon) ya que esta institución se caracterizó pos ser eminentemente elitista, en la que sólo tenían acceso las personas del rango pudiente de la ciudad de Zacatecas y un número muy reducido de los municipios más cercanos y que pertenecían a familias acomodadas que tenían parientes en la capital.
Es con la reforma de 1971, cuando se da la apertura para elaborar un plan de estudios acorde a la situación socio-política económica y cultural de ese tiempo, con ello también se dio la oportunidad de cambiar su política educativa, dando amplia cobertura para que ingresaran a sus aulas, todo aquel que lo deseara, sobre todo a las clases más desprotegidas.
Desde el período colonial, han existido en México instituciones dedicadas a impartir las enseñanzas que corresponden a lo que actualmente conocemos como Educación Media Superior. Estas instituciones o escuelas, con diferentes denominaciones, preparaban a la población de manera diferenciada, pues mientras las de naturaleza técnica habitualmente identificadas como Artes y Oficios –encaminaban sus esfuerzos a la formación de técnicos especializados en campos definidos de la práctica laboral inicialmente minera, por ser entonces un importante renglón productivo, las vinculadas, a las universidades o nacidas en su seno –bachilleratos- trabajaban en la formación de individuos cuya preparación les permitiera el acceso a estudios superiores. Aquí se reconoce la capacidad de movilidad social a la educación, provocando la demanda de escolarización entre la clase oligárquica presente.
Es hasta el año de 1988, cuando la Escuela Preparatoria decide cambiar su Plan de Estudios, en cuyo seno se dio un interno debate, fungiendo como asesor principal el Doctor Eduardo Remedi Alione y que posteriormente se implementa un Diplomado cuyo resultado fue un nuevo Plan de Estudios 1992 – 2003.
A una distancia de 10 años, surge la inquietud, de una Reestructuración del mismo, en cuyo proceso nos encontramos y que las actividades de este Primer Encuentro de Escuelas Preparatorias del País, es parte de esa inquietud; que esperamos rinda los frutos deseados para estar acorde a las demandas de la sociedad a la que nos debemos.
Agradecemos la Colaboración del Dr. José Luis Hurtado Bonilla